Para continuar con la relfexión impuesta en la muerte del weblog y los asuntos que le confieren a ellos una condición posmoderna innegable.
La relación entre weblogs “independientes” y algunos grandes medios de la que tanto reniegan y patalean los mismo protagonistas es lo que hace interesante lo que sucede en nuestras modernas esferas de la comunicación. Las oportunidades para nuevos espacios de comunicación que ha permitido el caos informativo puede verse como el camino hacia esa iluminación que con uniformidad pretendieron los izquierdistas y derechistas imponer a fuerza de sangre y odio.
Aunque siempre algún reaccionario saldrá en la defensa del método estricto y acucioso, no podemos negar que estamos ya en una era muy distinta y que en muchas formas la modernidad como estilo de vida ha fracasado al perseguir un fin último idealista y gregario.
La observación que se pueda hacer de las actividades que desempeñan algunos weblogs en la red dependerá estrictamente de un orden en la producción de la gran mayoría de las noticias por parte de los grandes medios con cierta tradición en el periodismo. Hallar la función real de los weblogs es la consideración que debe ocuparnos por ahora.
En su temprana edad los periódicos dieron a luz a los medios masivos, pero luego la aparición de la radio y la televisión no llenaron mas vacíos sino que debieron ganarse un espacio propio y una función especifica. Si bien la aparición de internet en algún momento hizo peligrar el status de todos los medios de comunicación juntos, su consolidación como sucesor de todos los medios no tuvo cabida en una sociedad consumista que no logró sostener las condiciones económicas con las que se pretendía implantar un nuevo imperio de la información.
La caída de las puntocom a mediados de los 90 nos demostró que el ímpetu no siempre es el mejor consejero y como consecuencia la red entró en un momento de reflexión crítica al que se respondió facilitando maneras económicas y viables para la distribución de información alternativa e independiente. Pero aún no se ha encontrado la función de estos canales.
Los weblogs, la manera mas revolucionaria de distribuir información a nivel masivo desde la aparición de la imprenta, son renuentes a aceptar ciertas funciones especificas y en la misma línea los medios tradicionales señalan con desdén estas nuevas formas de comunicación. No obstante, esta relación de amor y odio ha sido la que ha logrado mantener a la esfera girando, renovándose y explorando sus propias capacidades. Solo hay que tener en claro que no se puede pretender abogar por el derrocamiento de las funciones propias de medios anteriores a la globalización, esto sería menospreciar el poder acumulado a lo largo de muchas décadas. No se puede apostar por la desaparición de las demás maneras de información pues en definitiva, todas sostienen una red bastante complicada mediante la cual se intercambia información en la actualidad.
Por último se debe considerar que aún hay cosas por resolver en la blogosfera. La capacidad de publicar contenidos de manera gratuita y libre aun depende de grandes corporaciones que hacen posible esto. ¿Independencia? ... yo diría a medias.
Alguien en algún rincón juega peligrosamente con un alfiler y tarde o temprano reventará la burbuja.
Lo dicho... en mi opinión.
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..." en el nacimiento de una sociedad posmoderna los mass media desempeñan un papel determinante; que estos caracterizan tal sociedad no mas transparente, mas consiente de si misma, mas iluminada, sino como una sociedad mas compleja, caótica incluso; y finalmente que precisamente en este caos relativo residen nuestras esperanzas de emancipación.”
Gianni Vattimo. Posmoderno, una sociedad transparente, Paidos 1998.
La relación entre weblogs “independientes” y algunos grandes medios de la que tanto reniegan y patalean los mismo protagonistas es lo que hace interesante lo que sucede en nuestras modernas esferas de la comunicación. Las oportunidades para nuevos espacios de comunicación que ha permitido el caos informativo puede verse como el camino hacia esa iluminación que con uniformidad pretendieron los izquierdistas y derechistas imponer a fuerza de sangre y odio.
Aunque siempre algún reaccionario saldrá en la defensa del método estricto y acucioso, no podemos negar que estamos ya en una era muy distinta y que en muchas formas la modernidad como estilo de vida ha fracasado al perseguir un fin último idealista y gregario.
La observación que se pueda hacer de las actividades que desempeñan algunos weblogs en la red dependerá estrictamente de un orden en la producción de la gran mayoría de las noticias por parte de los grandes medios con cierta tradición en el periodismo. Hallar la función real de los weblogs es la consideración que debe ocuparnos por ahora.
En su temprana edad los periódicos dieron a luz a los medios masivos, pero luego la aparición de la radio y la televisión no llenaron mas vacíos sino que debieron ganarse un espacio propio y una función especifica. Si bien la aparición de internet en algún momento hizo peligrar el status de todos los medios de comunicación juntos, su consolidación como sucesor de todos los medios no tuvo cabida en una sociedad consumista que no logró sostener las condiciones económicas con las que se pretendía implantar un nuevo imperio de la información.
La caída de las puntocom a mediados de los 90 nos demostró que el ímpetu no siempre es el mejor consejero y como consecuencia la red entró en un momento de reflexión crítica al que se respondió facilitando maneras económicas y viables para la distribución de información alternativa e independiente. Pero aún no se ha encontrado la función de estos canales.
Los weblogs, la manera mas revolucionaria de distribuir información a nivel masivo desde la aparición de la imprenta, son renuentes a aceptar ciertas funciones especificas y en la misma línea los medios tradicionales señalan con desdén estas nuevas formas de comunicación. No obstante, esta relación de amor y odio ha sido la que ha logrado mantener a la esfera girando, renovándose y explorando sus propias capacidades. Solo hay que tener en claro que no se puede pretender abogar por el derrocamiento de las funciones propias de medios anteriores a la globalización, esto sería menospreciar el poder acumulado a lo largo de muchas décadas. No se puede apostar por la desaparición de las demás maneras de información pues en definitiva, todas sostienen una red bastante complicada mediante la cual se intercambia información en la actualidad.
Por último se debe considerar que aún hay cosas por resolver en la blogosfera. La capacidad de publicar contenidos de manera gratuita y libre aun depende de grandes corporaciones que hacen posible esto. ¿Independencia? ... yo diría a medias.
Alguien en algún rincón juega peligrosamente con un alfiler y tarde o temprano reventará la burbuja.
Lo dicho... en mi opinión.
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